El Hyundai Tucson es uno de los SUV más vendidos en el mundo, y la cuarta generación, lanzada en 2021, no ha sido una excepción.
Ahora, para mantener su frescura en el mercado, la marca surcoreana ha presentado un lavado de cara.
Recordemos que esta renovación es acompañada al unísono con su hermana pick-up, la Hyundai Santacruz.
Los cambios estéticos en el exterior son sutiles pero perceptibles. La parrilla delantera ha sido revisada con un nuevo diseño más prominente y tridimensional, que le da al SUV una mayor presencia en la carretera.
También se han actualizado los paragolpes delantero y trasero, y se han añadido nuevos elementos protectores en la parte inferior de la carrocería, lo que le da un aspecto más aventurero.
Puertas adentro, las alteraciones son más significativas. El panel ha sido reconfigurado, agrupando las dos pantallas de 12,3 pulgadas (una para el cuadro de instrumentos y otra para el sistema de info entretenimiento) de la misma manera que lo hace el Hyundai Ioniq 5.
Además, se han recuperado botones físicos para el climatizador y otras funciones, que se habían eliminado en la generación anterior.
El selector de marchas se ha desplazado hacia la columna del volante, lo que libera espacio en la consola central para un mayor espacio de almacenamiento, incluyendo una plataforma de carga inalámbrica para smartphones.
No se han anunciado cambios en la gama de motorizaciones del Hyundai Tucson. Se espera que se sigan ofreciendo las mismas opciones que en el modelo actual.
Es decir, versiones gasolina y diésel con microhibridación, además de las variantes híbrida e híbrida enchufable.
Fuente: conduciendo.com