GP de México: Verstappen gana y Hamilton se corona

0
659

Se tomó su particular revancha por lo de ayer Max Verstappen, y ciertamente de un modo inapelable, fraguando una victoria más que sólida de principio a fin sin dar la más mínima opción a ningún rival, en un circuito que parece talismán ya para el joven holandés, aparte de adaptarse como anillo al dedo al Red Bull.

Su brillantísima actuación no se vio empañada por nadie, pese a que se vivió una buena carrera en el Hermanos Rodríguez mexicano, con múltiples luchas en varios frentes, y con algún otro muy notable desempeño. Este  fue el caso del segundo de carrera, Sebastian Vettel, a quien por fin volvimos a ver serio y centrado, y realizando una carrera excelente de menos a más.

Tampoco estuvo mal el ganador de hace una semana, Kimi Räikkönen, quien también se mostró muy solvente, pese a no hacer mucho ruido, viniendo desde atrás para terminar tercero a base de ritmo sin más alardes, lo que se traducía, al subir al podio los dos Ferrari (por ninguno de los Mercedes) en dejar aun la puerta abierta en la disquisición del mundial de constructores.

Lewis Hamilton-MexicoQuizá lo único que pudo hacer sombra al triunfo de Verstappen, fue, evidentemente, la inevitable consecución de la quinta corona de Lewis Hamilton. Una suma de laureles que lo elevan ya al Olimpo de los intocables, Juan Manuel Fangio y Michael Schumacher, y que, en cuestión de títulos, lo alejan ya casi de terrenos épicos, para franquearle el paso a las salas legendarias.

Como decimos, la carrera resultó muy entretenida desde el inicio, en su mayor parte gracias a la elección que Pirelli llevó a México: los tres compuestos más blandos de toda su gama, los cuales además sufrieron mucha más degradación y sobrecalentamiento de lo esperado, lo que se tradujo en una terrible incertidumbre en cuanto a estrategias de boxes, a la par de notorios problemas y quebraderos de cabeza para casi todos los pilotos.

Sufrieron especialmente los Mercedes, y Hamilton en particular, quien pese a una gran salida, tuvo que plegarse a las gomas (y a no asumir riesgos innecesarios), lo que lo apartó por una lucha por la victoria en la que en otras circunstancias habría estado lógicamente como uno de los fijos.

La salida no le fue bien a Daniel Ricciardo y se vio superado casi instantáneamente por su compañero Verstappen y por Lewis (a punto estuvo de colársele también un Ferrari). El que sí hiló fino fue Carlos Sainz, adelantando tanto a Nico Hülkenberg como a Raikkonen para ponerse sexto, aunque al poco Kimi le devolvió la jugada.

Por su parte Fernando Alonso se vio inmerso en uno de esos percances tontos que pueden ocurrir al salir en la zona de barullo más retrasada, cuando se comía una pieza desprendida del Force India de Esteban Ocon, lo que a la postre concluyó con el abandono del de McLaren, que tristemente está padeciendo una despedida de la Fórmula 1 indigna de él.

Según se sumaban vueltas, pronto se evidenciaron varias cosas. Una de ellas era que el ritmo de Verstappen era el que marcaba el devenir y dominio de la prueba, con una solvencia francamente notable, controlando la carrera sin sobresaltos.

La otra era que estos sobresaltos sí los padecían casi todos los demás, con sus neumáticos. La mayoría de corredores que pronosticaban una táctica de una parada pronto se dieron cuenta de que habían sido muy, pero muy optimistas.

Las gomas apenas duraban diez giros, e incluso las más duras caían poco después, lo que obligó a replantear la estrategia a casi todos los equipos. Los que intentaban apurar gomas lo hacían a riesgo de perder mucho, y estuvimos viendo cronos por vuelta de incluso 13 segundos más lentos que la Calificación, lo cual es algo irrisorio.

Fuente: formulaf1.es

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí
Captcha verification failed!
La puntuación de usuario de captcha falló. ¡por favor contáctenos!