¿Por qué? Eso fue lo primero que nos preguntamos al enterarnos de que Ford ha solicitado una patente para instalar lo que es, en esencia, una palanca de cambios manual falsa en sus autos eléctricos.
La solicitud de patente de Ford, titulada «Conjunto de palanca de cambios para vehículo eléctrico», se publicó el 20 de marzo con el número 2025/0092947 en la Oficina de Patentes de Estados Unidos. Muestra una palanca de cambios convencional instalada en una caja.
¿Sólo busca imitar la sensación de cambiar de marcha de los vehículos de combustión interna? La solicitud muestra una palanca de cambios que replica diferentes patrones de transmisión manual, como la pista secuencial ascendente/descendente o un patrón en H, con seis velocidades. Estas configuraciones podrían modificarse dinámicamente mediante software.
En un auto con motor de combustión interna convencional, la palanca de cambios se une a la transmisión manual con conexiones mecánicas. En este caso, sólo se conecta a una serie de actuadores, controlados por un controlador electrónico de potencia. La solicitud de patente afirma que esta función «gestiona el flujo de energía eléctrica suministrado por la batería, controlando la velocidad de los motores y el par que cada uno produce».
Ford también pretende utilizar la retroalimentación háptica para replicar la sensación física del cambio de marcha y mejorar la experiencia de conducción. Podría replicar la sensación de varios tipos de palancas de cambios, desde un sistema de cable (más suave) hasta un mecanismo de varilla más convencional.
Este dispositivo podría proporcionar resistencia programable, sensación de engrane de marcha e incluso un zumbido. Y todo podría ajustarse a través del sistema de info entretenimiento del vehículo. Además de los eléctricos, el sistema podría aplicarse en híbridos enchufables, híbridos convencionales e incluso los vehículos de pila de combustible: experiencia de conducción manual para todos.
Las transmisiones manuales simuladas no son una idea nueva. Toyota desarrolló un concepto similar en 2022, con una transmisión manual simulada equipada con pedal de embrague que imitaba el cambio de marchas tradicional variando la entrega de par. Hyundai hizo algo similar con el Ioniq 5 N, con levas de cambio que generan una sensación similar a la de un auto de combustión interna.
No está claro si esta tecnología llegará a producción, pero cuando llegue el día en que desparezcan los motores de combustión interna, habrá quien prefiera tener la falsa sensación de cambiar de marcha a no tenerla. Y podremos enseñarles a nuestros hijos cómo conducíamos antes.
Fuente: coches.com
