En la década de 1960, cuando la imaginación colectiva soñaba con autos voladores y ciudades futuristas, el Golden Sahara II emergió como un ícono tangible de esa fantasía. Este automóvil personalizado, creado por el legendario diseñador George Barris y el empresario Jim Street, no solo capturó la esencia de la era espacial, sino que incorporó tecnologías que aún hoy sorprenden.
De los escombros a la gloria
Todo comenzó con un Lincoln Capri de 1953 accidentado, que Street adquirió y entregó a Barris para su transformación. El resultado fue el primer Golden Sahara, un vehículo recubierto en pintura nacarada hecha con escamas de pescado y adornos dorados.
Pero Street quería más. A principios de los 60, el auto fue rediseñado por completo, convirtiéndose en el Golden Sahara II, una obra maestra de la ingeniería y el diseño.
Tecnología que desafió su época
Lo que hizo único a este automóvil fue su innovación radical:
- Neumáticos luminosos: Fabricados por Goodyear en Neothane, con un caucho translúcido que se iluminaba desde dentro.
- Control remoto: Podía manejarse a distancia, una rareza absoluta en los 60.
- Hidráulica avanzada: Puertas y compartimentos accionados por sistemas hidráulicos.
- Habitáculo de lujo: Equipada con televisor, grabadora de cintas y hasta un minibar.
El motor, un V8 Lincoln Y-block, garantizaba potencia, pero el verdadero espectáculo estaba en su estética: un perfil alargado, faros envolventes y un techo transparente que evocaba naves espaciales.
Desaparición y resurgimiento
Tras años de gira en ferias y apariciones en televisión, el Golden Sahara II desapareció de la vista pública en los 70, convirtiéndose en una leyenda.
Tras la muerte de Street en 2017, el auto resurgió en una subasta de Mecum en 2018, donde fue adquirido por el museo Klairmont Kollections. Restaurado meticulosamente, incluso recreando sus famosos neumáticos luminosos, el auto se exhibió en el Salón de Ginebra 2019.
¿Cuánto puede costar el Golden Sahara II?
Un auto así, único y con tanta historia detrás, tiene un valor incalculable. Es una pieza de museo, un pedazo de historia automotriz que encapsula la audacia de una época donde el futuro parecía infinito. Sin embargo, el Golden Sahara II se subastará sin reserva el 20 de septiembre. Pronto sabremos cuánto vale hoy un sueño de los años 60.
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Fuente: coches.com
